“Xiinbal”: El robot caminante del IPN que podría ayudar a salvar vidas
Estudiantes del IPN crearon un robot cuadrúpedo llamado “Xiinbal”, que significa “caminante” en maya, como parte de su proceso de titulación.
12 agosto 2025 • 07:00 pm

México.- Estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) desarrollaron un robot cuadrúpedo llamado “Xiinbal”, que en lengua maya significa “caminante”. Este proyecto, nacido en agosto de 2023 como parte del proceso de titulación de Ryan Nathanael Cruz Barragán y Mauricio Emiliano Ruiz Alamilla, representa un avance prometedor en robótica e inteligencia artificial al servicio de la sociedad.
Xiinbal no solo aprendió a caminar por sí mismo mediante técnicas de Aprendizaje Reforzado, una rama de la inteligencia artificial, sino que también es capaz de desplazarse en entornos urbanos mientras recopila datos ambientales como temperatura, contaminación del aire y ruido.

Tecnología accesible y de código abierto
Uno de los aspectos más destacables de Xiinbal es su enfoque de bajo costo y código abierto. Tanto el hardware como el software están disponibles públicamente, con el objetivo de que otros desarrolladores o instituciones puedan replicar, estudiar o mejorar el diseño.

La estructura del robot imita a un animal cuadrúpedo, lo que le permite moverse de manera más eficiente en terrenos irregulares. Su diseño incluye cuatro extremidades de 4.3 cm, un peso de aproximadamente un kilogramo, batería de 12 volts, y sensores como LiDAR, que le permiten escanear el entorno en 3D y evitar obstáculos. Además, opera con plataformas ESP32, que se conectan a una computadora remota para ejecutar instrucciones.
Potencial para emergencias y rescate
El propósito de Xiinbal va más allá del ejercicio académico. Los estudiantes diseñaron el robot con el objetivo de que, en un futuro, pueda ser útil en labores de búsqueda y rescate, especialmente en situaciones como derrumbes tras sismos, donde su tamaño y capacidad de navegación podrían ser cruciales para encontrar víctimas entre los escombros.

Un reto técnico y humano
Los creadores compartieron que el desarrollo del robot fue todo un reto personal y técnico, que puso a prueba sus conocimientos en física, geometría en 3D, álgebra lineal y electrónica. Las primeras pruebas fueron fallidas: el robot caía y sufría daños. Sin embargo, la persistencia y el aprendizaje constante les permitieron lograr un desplazamiento estable.
“No se queden solo con titularse, busquen aportar algo real a la ciencia y la tecnología“, aconsejó Mauricio Emiliano a otros estudiantes. Por su parte, Ryan Nathanael celebró que este logro demuestra cómo una idea puede convertirse en una herramienta que, algún día, podría salvar vidas.
Xiinbal es un ejemplo claro del talento y la innovación que surgen desde las aulas del IPN, y una inspiración para el desarrollo de tecnología con propósito social.
Fuente: Agencias