Tepotzotlán: historia virreinal, sabores y tradición a las puertas de la CDMX
Tepotzotlán es un destino encantador cerca de Ciudad de México, lleno de historia, cultura y descanso.
11 septiembre 2025 • 08:00 pm


Tepotzotlán, Estado de México. Entre calles empedradas, plazas llenas de vida y el eco de campanas coloniales, Tepotzotlán se confirma como uno de los destinos más encantadores para quienes buscan historia, cultura y descanso a tan solo unos kilómetros de la Ciudad de México.

La Plaza de la Cruz y el jardín frente a la Hostería del Convento marcan el punto de partida para recorrer este Pueblo Mágico. El bullicio de su tianguis de fin de semana, el sonido de los sones frente al Mercado de Artesanías y el repique del Templo de San Pedro desde el amanecer crean una atmósfera única que combina lo festivo con lo devocional.

El corazón histórico: Museo Nacional del Virreinato
El antiguo Colegio de San Francisco Javier alberga hoy el Museo Nacional del Virreinato, uno de los recintos más importantes del país, con un acervo de más de 34 mil piezas de los siglos XVI al XIX y una biblioteca con más de 4,000 libros antiguos e incunables.
Este sitio forma parte de los 60 monumentos que atraviesa el Camino Real de Tierra Adentro, reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Entre lo imprescindible para los visitantes destacan los majestuosos retablos de San Francisco Javier, el Camarín de la Virgen de Loreto y el Relicario de San José, joyas del arte novohispano.
Experiencias que no te puedes perder
- Pasear en bici en el Centro Ecoturístico Arcos del Sitio, donde se levanta el acueducto colonial más alto del mundo.
- Degustar platillos virreinales en la Hostería del Convento, donde la historia se mezcla con la gastronomía.
- Vivir un vuelo en globo sobre el pueblo y sus alrededores, una experiencia que permite apreciar desde las alturas la majestuosidad de Tepotzotlán.
Con su riqueza patrimonial, sus tradiciones vivas y la calidez de su gente, Tepotzotlán invita a sumergirse en un viaje que combina pasado, presente y naturaleza.
Fuente: Agencias