Florida celebra nuevo arancel al tomate mexicano mientras Texas y Arizona alertan de empleos en riesgo
La decisión se produce tras el retiro oficial del Departamento de Comercio del Acuerdo de Suspensión del Tomate
16 julio 2025 • 10:00 am


Washington.- Legisladores y productores de tomate en Florida celebraron esta semana la decisión del gobierno estadounidense de reimponer aranceles al tomate importado desde México, una medida que ha reavivado el debate entre estados agrícolas del sureste y las regiones fronterizas que dependen del comercio con el país vecino.
La decisión se produce tras el retiro oficial del Departamento de Comercio del Acuerdo de Suspensión del Tomate (TSA, por sus siglas en inglés), un pacto vigente desde 1996 que evitaba aranceles a cambio de compromisos de precio por parte de exportadores mexicanos. El anuncio fue recibido con entusiasmo por la Florida Tomato Exchange (FTE), agrupación que ha liderado la demanda contra el presunto dumping de tomate mexicano.
“Esta decisión protegerá a los laboriosos agricultores de tomate estadounidenses de las injustas prácticas comerciales mexicanas y mandará una fuerte señal de que la Administración Trump está comprometida a garantizar mercados justos”, declaró Robert Guenther, vicepresidente de la FTE.
Florida, que representa cerca del 70% de la producción nacional de tomate, cultivó en 2024 un valor estimado de 331 millones de dólares, según datos del Departamento de Agricultura (USDA). Legisladores como el senador republicano Rick Scott atribuyeron la caída de la participación del tomate estadounidense de un 80% en 1994 a apenas 30% en la actualidad a la vigencia del acuerdo con México.
“He estado trabajando para proteger a los agricultores floridanos por años. La Administración Biden no hizo nada para detener el dumping de tomates. Gracias al presidente y a Howard Lutnick (secretario de Comercio) por poner a los agricultores estadounidenses primero”, escribió Scott en redes sociales.
Impacto en estados fronterizos
Sin embargo, la decisión ha sido duramente criticada por productores, importadores y legisladores de estados fronterizos como Texas y Arizona, que dependen de la importación del fruto para su industria y empleo local.
La Texas International Produce Association (TIPA) advirtió que la imposición del arancel pone en riesgo hasta 47,000 empleos relacionados con la cadena de distribución de tomate mexicano en EE.UU. Solo en 2024, casi 952 mil toneladas del fruto cruzaron la frontera por Texas.

“Esta medida puede afectar más de 8,300 millones de dólares en actividad económica y elevar hasta en un 50% el precio del tomate para los consumidores estadounidenses”, alertó Dante Galeazzi, presidente de la TIPA.
México y el T-MEC en el horizonte
El fin del acuerdo de suspensión también podría tensar las relaciones comerciales con México, el principal proveedor de tomate fresco a Estados Unidos, en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Productores mexicanos han rechazado las acusaciones de prácticas desleales y advierten sobre posibles medidas de respuesta.

En medio de esta disputa, el país se enfrenta a un dilema entre proteger su producción agrícola nacional o mantener los beneficios del comercio abierto con su vecino del sur. Mientras tanto, consumidores en todo EE.UU. podrían sentir pronto el impacto en el bolsillo, al encarecerse uno de los productos frescos más consumidos del país.
Fuente: Agencias