Calvillo, Aguascalientes: el pueblo mágico donde huele a guayaba y se respira aventura
El aroma a guayaba y la producción de frutas y textiles hacen de Calvillo un lugar que invita a quedarse.
03 agosto 2025 • 05:00 pm


Calvillo, Aguascalientes. — El aroma a guayaba guía los pasos de quienes llegan a este Pueblo Mágico enclavado entre montañas, arroyos y tradiciones centenarias. Calvillo, reconocido por su producción de frutas y textiles artesanales, ofrece una mezcla única de historia, sabores y naturaleza, donde cada visitante encuentra una razón para quedarse un poco más.
Desde el primer contacto con su centro histórico, la experiencia es sensorial: calles arboladas, velas artesanales, quesos típicos y el inconfundible aroma del dulce de guayaba invitan a explorar sus rincones. La majestuosa Parroquia del Señor del Salitre, con su impresionante cúpula, es un ícono fotográfico obligado para los viajeros.

Naturaleza que abraza y aventura que reta
Los alrededores de Calvillo invitan al ecoturismo y al descanso activo. La Presa de Malpaso, además de ofrecer un paisaje impresionante, es ideal para paseos en lancha, pesca deportiva o travesías en kayak rumbo al cañón de La Boquilla.

No muy lejos, la Presa de La Codorniz deleita con su gastronomía y tradición: allí se ubica el segundo restaurante más antiguo de la región. Es un sitio perfecto para disfrutar de un pescado fresco a la orilla del agua, en plena armonía con el paisaje.
Para los amantes del senderismo, ciclismo de montaña y el turismo sustentable, la Sierra Fría con más de 100 mil hectáreas de bosque es un paraíso por descubrir. La biodiversidad de la zona incluye venados, pumas y gatos monteses, lo que también la convierte en un área de cacería regulada y hospedaje en cabañas ecoturísticas.
En la Sierra del Laurel, al sureste del municipio, el visitante encuentra otra cara de la aventura: tirolesas, senderos, circuitos para bici de montaña, cabañas familiares y un entorno que invita a desconectarse del bullicio urbano y reconectar con la naturaleza.
Lo que no te puedes perder en Calvillo
- Recorrer la Presa de Malpaso en kayak y comer en alguno de sus restaurantes.
- Visitar el Museo Nacional de Pueblos Mágicos y entender la identidad de Calvillo en el contexto nacional.
- Explorar el complejo turístico Santa Cruz, un lugar de contemplación religiosa y vistas panorámicas.
- Probar al menos cinco tipos de dulces artesanales en Frutland, famoso por sus productos de guayaba.
- Comer una nieve de garrafa o un tradicional chamoco, dulces que resumen la esencia de la región.

Un destino que enamora a cada paso
Dormir en una cabaña bajo las estrellas, respirar el aire puro de la montaña y despertar con los sonidos del bosque es una de las experiencias más reconfortantes que ofrece Calvillo. Quienes lo visitan no solo se llevan postales inolvidables, sino también una conexión profunda con su historia, naturaleza y sabor a hogar.
Calvillo no solo huele a guayaba. Huele a tradición, a descanso, a aventura… y a magia.
Fuente: Agencias